lunes, 29 de diciembre de 2014

La huella libertaria sigue bien viva en Barcelona


La reciente Operación Pandora supone el último capítulo de la represión contra el anarquismo, un movimiento con unas raíces muy profundas en Cataluña y cuya influencia va mucho más allá de los colectivos que se definen como tales

MARC FONT

Siete de las once personas detenidas el pasado martes 16 de diciembre en la Operación Pandora siguen en prisión preventiva en el centro penitenciario madrileño de Soto del Real. La operación, una iniciativa de los Mossos d'Esquadra que ejecutaron ellos mismos con la autorización de la Audiencia Nacional, se desarrolló fundamentalmente en Barcelona y golpeó al movimiento libertario. Los encarcelados están acusados de pertenencia a organización terrorista, tenencia de artefactos explosivos y daños y estragos.

A pesar de la sorpresa e indignación que la actuación provocó en parte de la sociedad catalana —miles de personas se manifestaron pidiendo la libertad de los detenidos la misma tarde—, el consejero de Interior de la Generalitat, Ramon Espadaler, afirmó el pasado viernes que «de las medidas adoptadas con los detenidos se desprende que la operación está suficientemente fundamentada y demuestra que estaba más que justificado avanzar en este terreno». El mismo 16 de diciembre, los Mossos d'Esquadra emitieron una nota de prensa asegurando que habían actuado contra el «terrorismo anarquista», una expresión que fue reproducida de manera acrítica por la mayoría de los medios de comunicación. Y que supone una criminalización evidente del anarquismo.

En Cataluña hay numerosos colectivos y ateneos libertarios, pero ¿cuál es el peso que tiene hoy el movimiento? Para el historiador Xavier Díez, «la influencia del anarquismo no ha desaparecido nunca del todo. Tiene una presencia constante desde el segundo tercio del siglo XIX». Especialista en la cuestión —ha escrito varios libros sobre el anarquismo—, Díez opina que la influencia del movimiento libertario «va mucho más allá de su nombre y de los movimientos o personas que explícitamente se reivindican como tales». En este sentido, el historiador expone a Público que características propias del anarquismo, como la autoorganización, la autogestión, la autonomía, el rechazo a una autoridad externa o el ejercicio de la democracia directa están hoy arraigados en buena parte de los movimientos sociales del país y en organizaciones tan distintas como la PAH o la independentista Assemblea Nacional Catalana (ANC).

En una línea similar se expresa X. Oural, miembro del Procés Embat, una iniciativa presentada en octubre que pretende articular un anarquismo organizado como alternativa real a la sociedad capitalista. El activista afirma que las «prácticas libertarias están extendidas y asumidas por los movimientos sociales, pero en cambio no lo está el objetivo de construir una sociedad más libertaria». Xavier Díez formula la distinción entre el «anarquismo explícito, que se reconoce y reivindica como tal, y el anarquismo implícito que, sin reconocerse y hasta desde una determinada prevención, asume gran parte de sus preceptos».

La 'Rosa de Foc'

Durante el primer tercio del siglo XX, el peso y la visibilidad pública del movimiento libertario en Cataluña fue enorme y la ciudad llegó a ser conocida como la Rosa de Foc (rosa de fuego), un término que define una etapa de gran conflictividad política y social en la que la violencia anarquista respondía al pistolerismo y terrorismo patronal. En la Segunda República, el sindicato anarquista CNT sumaba cientos de miles de afiliados, pero después de las casi cuatro décadas de dictadura franquista la situación cambió. Para Xavier Díez, desde entonces el «anarquismo catalán empieza a tomar formas, instituciones y prácticas que lo asimilan a la mayor parte de los anarquismos europeos y se convierte en un movimiento más individualista y centrado en causas más concretas, como el ecologismo, el antimilitarismo o el movimiento okupa».

Díez reconoce la «fragilidad» de las «instituciones anarquistas» actuales, a lo que X. Oural añade que el movimiento libertario suma 30 años «replegado en una cultura de resistencia, cerrado en sí mismo» y considera que «ahora toca dar un paso adelante y pasar a una política más de intervención social». Con todo, el movimiento también toma parte en los principales debates abiertos actualmente en la sociedad catalana y, por ejemplo, más de 1.700 personas participaron el pasado 11 de setiembre en la llamada Vía Libertaria —como respuesta a la independentista Vía Catalana organizada por la ANC—, y la consulta sobre el futuro de Cataluña del pasado 9 de noviembre generó una diversidad de opiniones en los movimientos anarquistas, como reflejó la revista Directa.

Criminalización de una ideología

La represión al movimiento libertario ha sido constante a lo largo de la historia y la Operación Pandora es, de momento, el último capítulo. Para el abogado Benet Salellas, que defiende a dos de los detenidos —uno los cuáles está ahora en Soto del Real—, la operación no responde a una preocupación social. «Eso me lleva a sospechar que la unidad de información [de los Mossos] trabaja con unos objetivos distintos al del mantenimiento de la seguridad», afirma. Salellas también se encargó de la defensa de Núria Pòrtulas, una joven anarquista de Gerona detenida en 2007 que pasó cuatro meses en prisión preventiva bajo la acusación de pertenencia a banda armada, antes de que en 2010 el Tribunal Supremo la absolviera de cualquier delito.

El abogado considera que con la actuación de la policía catalana «se criminaliza una visión ideológica». Con ello, «el derecho penal se expande más allá de sus fronteras naturales porque primero se va a buscar una ideología» para después intentar atribuirle «ataques a personas y bienes». Por su parte, X. Oural, del Procés Embat, opina que «es representativo» que la Pandora se desarrollara en la semana de movilizaciones contra la Ley Mordaza y contra un movimiento «que se pretende marginar y que es un enemigo fácil de construir».

El historiador Xavier Díez añade que en un momento en el que «cada vez más gente cuestiona el capitalismo, operaciones como ésta buscan golpear al anarquismo, un movimiento capaz de crear un relato crítico y alternativo al sistema». Para Salellas, la represión se tiene que ver también como una «manera de tener ocupados a los activistas en apoyar a la gente presa, en lugar de poder dedicarse a construir una alternativa». Díez, por su parte, concluye que los anarquistas juegan en la actualidad un «papel muy similar al que tenían los disidentes en el antiguo bloque comunista y son señalados como peligrosos, a pesar de que sean pocos». Pocos, pero con una influencia mucho mayor de la que se puede creer a primera vista. Y es que los movimientos sociales actúan siguiendo postulados libertarios, a pesar de que algunos ni tan siquiera sean conscientes de ello.

26-12-2014

jueves, 25 de diciembre de 2014

La FAI ante la represión del anarquismo...

 [... y su manipulación mediática]

La FAI (Federación Anarquista Ibérica) manifiesta su rechazo a las recientes detenciones de anarquistas en Cataluña y Madrid, y brinda su apoyo solidario a las personas detenidas y encarceladas, así como a sus familiares y personas allegadas.

El crecimiento organizado del entorno libertario y la protesta social en los últimos años está siendo perseguido sistemáticamente por el Estado, bajo el amparo de leyes represivas que califican de terrorista todo tipo de conductas contrarias al orden establecido. No en vano los arrestos son un aviso para quienes participan en cualquier actividad reivindicativa y son la puerta de entrada a la nueva Ley Mordaza (Ley de Seguridad Ciudadana) que pretende instaurar un estado de excepción encubierto que pare el movimiento social de cambio que ya ha comenzado. Por eso el Estado genera alarma social mediante operaciones policiales y procesos judiciales basados en indicios y acusaciones arbitrarias, que alimentan el falso mito del anarquismo terrorista y promotor de la lucha armada.

Este tipo de operaciones antiterroristas suelen concluir con la absolución o la imposición de condenas menores a las personas represaliadas, en consonancia con la inexistencia de organizaciones armadas y atentados terroristas en el territorio español.

Según apuntan algunos diarios (como Libertad Digital) el auto judicial del juez Gómez Bermúdez refleja la existencia de alguna relación entre las personas detenidas y la FAI, desprendiéndose de estas afirmaciones que tenemos ideas y prácticas violentas, lo cual es absolutamente falso.

Algunos medios de comunicación (como la agencia Europa Press y diversos portales web, afines al Gobierno) intentan intoxicar, confundirnos y relacionarnos con la organización FAI-FRI (Federación Anarquista Informal – Frente Revolucionario Internacional), y los GAC (Grupos de Anarquistas Coordinados) que nada tienen que ver con nosotros.

La práctica de la FAI es visible y pública, de carácter internacionalista y social. Así lo evidencian tanto nuestra adhesión a la IFA (Internacional de Federaciones Anarquistas), como el amplio espectro de actividades que realizamos en la sociedad.

La FAI promueve el desarrollo de la organización anarquista y social, basada en la acción directa, el apoyo mutuo y la autogestión, y sin ningún tipo de injerencia por parte del Estado y del Capital, ya que la FAI lucha por el surgimiento de una sociedad emancipada de este sistema y que favorezca el desarrollo libre e integral de las personas.

Por todo lo expuesto, la FAI denuncia públicamente el encarcelamiento y represión de la militancia anarquista, la protesta social, así como la campaña de manipulación mediática del anarquismo y de esta Federación.


viernes, 19 de diciembre de 2014

Ni Dios

 

Los hombres hicieron a sus dioses semejantes a ellos, dioses crueles y despiadados, criminales violentos y genocidas, enmascarados muchas veces con palabras tan bellas como falsas.

En nombre del amor descabezaban infieles los buenos cristianos, en nombre de Alá el misericordioso los infieles descabezan hoy a los buenos cristianos, en nombre de Jehová masacran los israelíes a sus vecinos de la tierra ocupada y siempre, animando y bendiciendo a las hordas sanguinarias, figuran los sacerdotes de cultos ancestrales profundamente enraizados en sus «culturas» y «civilizaciones». Un mundo sin dioses sería, sin duda, más pacífico y piadoso. Así sería si las milenarias supercherías y las supersticiones más aberrantes no siguieran en la bocas y en los corazones de los primeros mandatarios del mundo, personas a las que se supone capaces de liderar el orbe y guiar a los pueblos en el camino. Si el colérico dios del Sinaí hubiera cumplido su amenaza, tantas veces repetida, de exterminar a sus criaturas y dar por concluido el fallido experimento, la Tierra sería otra y sus pobladores inocentes como animales y no canallas como cristianos, judíos o musulmanes.

La Yihad practica un exterminio selectivo, no es el amor sino el terror lo que se predica en los dos lados de un frente siempre activo. Históricos agravios y venganzas perpetuas, el ojo por el ojo y el diente por el diente, la violencia es ciega y bajo los barnices más sofisticados afloran los instintos más primitivos y salvajes. Libre sea cada uno de creer en su dios siempre que no trate de imponer sus creencias al prójimo en nombre de una religión cualquiera. Las religiones comercian con lo más sagrado y ofrecen paraísos post-mortem, ofertas que no se pueden comprobar y que los crédulos no pueden rechazar porque en su soberbia creen que merecen algo mejor que la muerte y ansían la inmortalidad. En nombre de la Humanidad habría que acabar con todos esos dioses para salvar a los hombres, pero los ateos son, somos, estigmatizados y perseguidos. La diosa Razón se bate en retirada en todos los frentes y las viejas e inicuas deidades siguen en pie, y una amplia mayoría prefiere seguir caminando de rodillas.

jueves, 18 de diciembre de 2014

CNT contra la Operación Pandora


Una vez más el sistema pone en marcha sus mecanismos de represión y manipulación mediática. Las élites económicas y políticas de esta España nuestra tienen una arraigada tradición casi obsesiva de intentar asustar a la sociedad con el «peligro anarquista». Para ello, siempre se han valido de mentiras, engaños, montajes y falsas etiquetas. Se están empleando a fondo para convertirnos en el «enemigo público número uno», ese que amenaza la paz social. Aunque realmente somos una amenaza porque cuestionamos sus privilegios y beneficios como clase social dominante y pretendemos erradicarlos por una cuestión de justicia social.

Sin duda, esto es un delito para ellos, y es la verdadera razón para criminalizar, reprimir e intentar aislar las ideas y valores del anarquismo.

Terrorismo organizado e institucional es la Ley Mordaza, la reforma laboral, el paro, los desahucios, la desmantelación y privatización de la sanidad, la educación y servicios públicos en general. Un nuevo intento de justificar la violación de libertades con su recién aprobada ley de seguridad ciudadana y de que miremos hacia otro lado mientras se produce el desfile de políticos corruptos camino a los juzgados.

La criminalización de los movimientos sociales empieza a tener escasa repercusión en una sociedad cansada de la manipulación mediática al servicio de gobiernos e intereses económicos, y empieza a identificar a los verdaderos culpables de la situación.

Basta ya de manipulación mediática.

No a la criminalización de los Movimientos Sociales.

No a la Ley Mordaza.

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Solidaridad con los detenidos de la Operación Pandora


En relación a las recientes detenciones de compañerxs anarquistas, desde Espacio Libertario declaramos:

En las últimas horas, de acuerdo a las órdenes de la Audiencia Nacional, varixs compañerxs anarquistas han sido detenidxs. Frente a la sarta de mentiras con que se suelen justificar estas agresiones, nos parece especialmente importante que se conozcan los motivos de fondo que han llevado a la ejecución de estas órdenes.

Independientemente de los hechos de que se acuse a los detenidos en este caso particular, sobre los que no nos vamos a pronunciar en ningún momento, entendemos que se trata de un paso más en la amplia operación represiva que se está llevando a cabo desde instancias gubernamentales. Son ya muchas las personas que se han visto afectadas por estos ataques a la libertad y la dignidad de todas, por unos motivos o por otros. Muchas veces por pura conveniencia política. De hecho no es difícil que tu vecino, tu amiga, tu hermana o tu hijo se hayan visto afectados.

No nos cabe duda de que el Estado está recurriendo a una estrategia del miedo y la división para evitar que cuaje un proceso colectivo que pueda llegar a amenazar los privilegios de quienes se benefician de la desgracia de todas. El malestar crece cada día conforme se conocen más casos de corrupción o empeora la situación laboral y económica de las trabajadoras, mientras los más ricos aumentan el consumo de artículos de lujo y los bancos arrojan beneficios millonarios a costa de las familias desahuciadas. Ante esta situación cada vez somos más las desfavorecidas que decidimos trabajar desde la base, de manera asamblearia, horizontal y autogestionada para defender nuestra libertad y dignidad.

Desde el Estado se quiere frenar este proceso colectivo, dividiéndolo. Realizando detenciones entre las personas más comprometidas se busca separarlas y aislarlas del resto, criminalizándolas, como si no compartiesen los mismos problemas y objetivos que las demás. A su vez los arrestos son una amenaza nada velada a quienes participan en cualquier actividad reivindicativa, sea del tipo que sea. No en vano la nueva Ley Mordaza (o de Seguridad Ciudadana) pretende instaurar un estado de excepción encubierto que pare el movimiento de cambio que ya ha comenzado.

Precisamente por ello, en este momento, queremos decir que no vamos a dejar que la represión nos pare. Podríamos afirmar que no tenemos miedo, y sería seguramente mentira. Pero tenemos claro que mientras no se caiga en la estrategia estatal de la división y la parálisis, serán ellos quienes sientan un temor cotidiano a que se les escape la situación de la manos y, esta vez sí, las cosas empiecen a cambiar. El primer paso en este camino es no caer en el juego canalla de la división, la criminalización y la amenaza que tan bien sabe jugar el Estado, en tándem con los medios de comunicación mayoritarios.

Las detenciones no nos sorprenden. Como sujetos dispuestos a exigir libertad y dignidad para todas, lo mínimo que podemos esperar son los ataques del Estado y los guardianes de los privilegiados. Pero ante estas agresiones lo único que podemos decir es que seguiremos adelante, con tu apoyo. Esperamos sinceramente que esta lucha sea también la tuya pronto, de modo que entre todas construyamos ese nuevo mundo que cada día se hace más urgente, unidas y sin miedo.

¡Solidaridad con lxs detenidxs, libertad para todxs lxs presxs polítcxs!

Madrid, 16 de diciembre de 2014

 

domingo, 14 de diciembre de 2014

Ouróboros: La espiral de la pobreza

 

Desde febrero de este año, el Grupo Anarquista Albatros se ha embarcado en un proyecto audiovisual que está a punto de ver la luz. Se trata de un documental sobre la solidaridad en contraposición a las formas de caridad de la Iglesia que, también y cada vez más, hace suyas el Estado. Ofrecemos a nuestros lectores una entrevista con miembros del grupo.

Diciembre 2014

¿De dónde viene la idea de impulsar una película sobre este tema?

Pues nos animamos a intentarlo a raíz de la investigación que un miembro de nuestro grupo, Julio, había hecho sobre este tema. Vimos que la participación de quienes han estado o están en proyectos de solidaridad de base y sus experiencias topándose contra las instituciones de beneficencia de toda la vida ligadas a la Iglesia católica podían ser un buen complemento a la crítica que ya se estaba haciendo en forma de conferencias.

¿De dónde viene y qué significa «Ouróboros»?

Hubo algunas reticencias a poner esta palabra por ser poco común, pero finalmente nos decidimos porque encierra una alegoría que refleja perfectamente el mecanismo de la caridad. Es una palabra de origen griego que hace referencia a un sistema cerrado, infinito, del que no se puede salir (entre otras acepciones). Estamos acostumbrados a verlo representado por una serpiente comiéndose la cola y seguro que muchos se acuerdan del «Auryn» de aquella obra genial de Michael Ende titulada La historia interminable. Con ello queremos simbolizar la realidad perversa, donde quienes son los responsables de la miseria de una parte importante de la población (cada vez mayor) con sus políticas desde los distintos gobiernos, con la explotación indiscriminada de los trabajadores desde la patronal, o con la mentira defensora del orden vigente desde los púlpitos, se colocan a continuación en la primera línea de la «preocupación por la pobreza» e impulsan donativos respondiendo a un deber cristiano, que es mucho menos molesto que la ética, que cuestionaría el origen de su riqueza. Hay quien lo ha apuntado certeramente al decir que es contra la riqueza contra lo que hay que luchar, no contra la pobreza, porque una es el origen de la otra.

¿Con quién habéis contado para la realización del documental?

En la parte técnica hemos contado con gente de un nivel profesional al que no estamos acostumbrados, si somos sinceros, y se va a notar en el acabado final. Pero además de las cámaras y el sonido ha sido realmente emotivo poder contar con compañeras en las tareas de transcripción, traducción, subtitulado y otras, que se ofrecieron desde el primer minuto y sin cuyo esfuerzo militante no lo hubiésemos terminado ni en el tiempo ni con la calidad que lo vamos a poder disfrutar.

Por otro lado, para dar voz a la historia, hemos creído conveniente entrevistar a personas como Gonzalo Puente Ojea, ex embajador en la Santa Sede y autor de muchos libros desmontando el cristianismo que hemos heredado y en defensa del ateísmo, y Ana Lima, presidenta del Consejo General del Trabajo Social, desde donde se denunció el programa «Entre Todos» en el primer minuto de emitirlo en la televisión pública. Desde el plano de la lucha organizada asambleariamente incorporando prácticas de intervención social participan dos portavoces del colegio cordobés ocupado Rey Heredia, un miembro del Campamento Dignidad de Mérida, que nos cuenta su choque con la Fundación Banco de Alimentos de Badajoz, un miembro de la asamblea del 15-M del barrio madrileño de Tetuán donde montaron un Banco de Alimentos propio que fue cerrado por la policía por la intervención de la FESBAL (Federación Española de Bancos de Alimentos) y dos personas de la OFIAM (Oficina de Apoyo Mutuo de Manoteras, también barrio de Madrid). A todos y todas ellas y a otros que no mencionamos no nos cansaremos de agradecer lo fácil que nos han puesto las cosas. También utilizamos una entrevista en radio a nuestro compañero Julio Reyero para aportar datos de su investigación sobre las instituciones de caridad más relevantes a las experiencias que cuentan el resto de compañeros.

¿Cómo habéis financiado la película?

Pues como no podía ser de otra forma con la colaboración de quienes nos rodean en primer lugar. Las fundaciones Anselmo Lorenzo y Aurora Intermitente han participado generosamente, así como varios compañeros de nuestro grupo y de los demás grupos de la Federación Anarquista Ibérica. También nos ha echado una mano AMAL (Asociación Madrileña de Ateos y Librepensadores), así como sindicatos de la CNT como Aranda de Duero, Málaga, Salamanca, Toledo y muchas otras personas que se sintieron interesadas por el tema a raíz de los artículos y las charlas que se han dado al respecto. Aprovechamos estas líneas para mandar un saludo cariñoso a todos ellos, y a todas aquellas personas que siguen colaborando o piensan hacerlo al leer esta entrevista, a las que invitamos a ponerse en contacto con el grupo.

Ha sido un desembolso considerable si hablamos en bruto y teniendo en cuenta a lo que estamos acostumbrados, pero en relación al resultado se ha abaratado muchísimo por la colaboración de toda la gente participante que ha creído que merecía la pena que este proyecto saliese adelante. Desde luego no podemos esperar que algo así salga de las instituciones del régimen porque es un hachazo a la raíz ideológica del sistema.

¿Cuándo y dónde pensáis estrenar la película?

Pues si todo va como esperamos estaría todo dispuesto para finales de enero y pretendemos hacer una presentación llamativa en una sala de cine con bastante aforo. Todavía no lo tenemos atado, pero es probable que sea en el Cine Doré de la Filmoteca Española o si no es posible buscaríamos una sala similar. Creemos que el tamaño es adecuado porque tendrá bastante repercusión, o al menos eso esperamos, tanto por la diversidad de la gente que ha colaborado como por la temática. Que sepamos no hay otros trabajos parecidos en torno a este tema, e incluso medios considerados de izquierdas tienen como referencia de lucha contra la pobreza el modelo de Cáritas y sus informes.

Posteriormente lo pondremos a disposición pública y gratuita en Internet, y para que pueda verse en zonas de habla no hispana lo estamos traduciendo y subtitulando al inglés, francés, alemán, probablemente italiano y esperanto, como no podía ser menos. Si pasado enero alguien tuviese dificultades en encontrarlo puede ponerse en contacto con nosotros y le facilitamos la forma de conseguirlo.

Para finalizar, diremos que esperamos que sea interesante para la mayoría de espectadores, que tenga muchos y que resulte útil en el combate en el que estamos por darle la vuelta a la tortilla en un mundo en el que se envían seis furgones policiales a desahuciar de su casa a una anciana de 85 años en Vallecas al mismo tiempo que se protege a dirigentes políticos que han robado en dinero público casi la misma cantidad que le reclaman a esta señora (véase el caso de Beltrán Rodríguez, no es un ejemplo inventado). Va a tener razón la Iglesia sobre que es una crisis de valores, pero no los que ellos creen.

viernes, 12 de diciembre de 2014

Patria y humanidad



Por ÉLISÉE RECLUS

La cuestión —si el patriotismo es incompatible con el amor a la humanidad— no puede tratarse sin una definición preliminar.

¿Qué es el «patriotismo» tomado en el sentido verdaderamente popular, subentendido en toda fraseología? Es el amor exclusivo a la patria, sentimiento que se complica con un odio correspondiente contra las patrias extranjeras. ¿Y qué es la patria? Un territorio grande o pequeño, netamente delimitado por fronteras de origen diverso, obstáculos naturales, barreras artificiales o simples líneas trazadas según la voluntad de alguno, antes sobre el papel, después trasladadas al terreno.

Partiendo de estas definiciones que ciertamente responden a la idea general de los pueblos interesados, tal cual es por lo demás sancionada triplemente por la diplomacia, por el régimen militar y por el sistema fiscal, se debe reconocer que la patria y su derivado, el patriotismo, son una deplorable supervivencia, el producto de un egoísmo agresivo que no puede conducir más que a la ruina de las mejores obras humanas y al exterminio de los hombres.

Pero el pueblo es sencillo, y bajo esa palabra «patria» se le han dado a entender mil cosas dulces y bellas que no implican en manera alguna la división de la tierra en parcelas enemigas.

El suave perfume de la tierra natal, las figuras sonrientes de los viejos que nos aman, los recuerdos queridos de estudio y de investigaciones con compañeros atrevidos, las obras emprendidas en común en la juventud y sobre todo la fábula que resonó primero en nuestro oído, y en la que hemos escuchado las palabras que han decidido nuestra vida, todo esto es herencia natural de todo hombre en cualquier parte del mundo en que esté situada su cuna, todo esto es anterior a la idea de una patria limitada, y es puro sofisma querer coligar estos sentimientos con la existencia de un polígono efímero cortado sobre la redondez de nuestra planeta.

Hay al contrario completa oposición entre estas primeras impresiones que nos ligan a la tierra y a la sociedad humana y todas las líneas de división que impiden la libre formación de los grupos humanos y que intentan limitar lo que por la naturaleza de las cosas es indisciplinable, la simpatía de los hombres entre sí, su espíritu de mutua benevolencia y de solidaridad.

Históricamente, la patria fue siempre mala y funesta. Fue siempre un dominio, reivindicado como propiedad exclusiva por un amo absoluto, o bien por una banda de amos organizados en jerarquía, o, como en nuestros días, por un sindicato de clases privilegiadas y dirigentes. Siempre, por mucho que nos remontemos en el pasado, hallamos que los ciudadanos pacíficos han debido, en nombre de una patria de fronteras siempre diversas, trabajar, pagar y combatir, siempre oprimidos por los parásitos, reyes, señores, guerreros, magistrados, diplomáticos y millonarios. Y fueron esos parásitos en lucha con otras bandas de haraganes los que han marcado las barreras de separación entre pueblos vecinos, hermanos a causa de los intereses comunes. Para defender o ensanchar esos límites absurdos se han sucedido las guerras a las guerras: era preciso que los mojones limítrofes fuesen plantados entre cadáveres, como en un tiempo las puertas de las ciudades.

En nuestros días, las fronteras son más funestas que nunca, aun cuando son más a menudo atravesadas, porque son conservadas más metódica, más científicamente que en el pasado con fortificaciones, puestos de aduana, guardias móviles. Si el comercio consigue penetrar bajo el impulso de necesidades vitales, ocurre sólo después de largas explicaciones entre los Estados y la construcción de grandes obras militares. La zona de separación es tabulada en toda su longitud; y con maquinaciones incesantes, con la ayuda de verdaderos crímenes, se suscitan odios tremendos a ambos lados de la frontera ficticia, trazada a lo largo de algún arroyo entre los bosques y los prados.

Y casi diré que hay de escandaloso este hecho, que en el siglo de las locomotoras y de los motociclos de toda especie no hay más que una línea ferroviaria entre Francia y España, y ni siquiera una carretera viable a través de los Pirineos. A pesar de la geografía, no se quiere que las dos naciones sean vecinas, no se quiere que, cesando de ser patrias diversas, se conviertan en un solo país de una misma familia unida.

El vasto mundo nos pertenece y nosotros pertenecemos al mundo. Abajo todas las fronteras, símbolos de dominación y de odio. Tenemos prisa por poder abrazar al fin a todos los hombres y llamarnos sus hermanos

(Nº 317, DICIEMBRE 2014)